No se conocen datos históricos sobre este pequeño castillo, quiza fue una posición musulmana para vigilancia del valle del Huerva, aunque la tradición oral atribuye su construcción a los Templarios, que en esta zona recibieron tierras tras el acuerdo con Ramón Berenger IV.

También pudo ser uno de tantos refugios construidos como consecuencia de la guerra de los Pedros, ya que la cercana Cariñena fue invadida por los castellanos en 1363.

En 1240 se precisaron los límites de Tosos con Villanieva de Huerva, Longares y Fuendetodos, quedando dentro de su término el cercano castillo de Alcañiz o Alcañicejo.
Desde finales del siglo XIV la villa de Tosos se integró en el patrimonio de los Fernéndez de Heredia, que por entonces adquirieron varios señorios en la zona. Sobre una prominencia rocosa situada junto a la margen izquierda del Huerva, se alza esta torre de mampostería con planta poligonal irregular, de siete lados y distinta longitud; por el lado más accesible, una rampa formando zigzag cruza la ladera y lleva hasta la puerta de ingreso, ya muy deformada.

VISTA GENERAL DESDE LA ROCA QUE DA COBIJO AL TEMPLO

Interiormente está dividida en dos estancias separadas por un paredón que representa una ventana y la puerta de comunicación en arco rebajado. En la estancia principal quedan vestigios de las tres plantas que tuvo y de las escaleras de acceso a las superiores, así como una cámara subterránea y el tejado La estancia contigua es más pequeña y sobresale en altura formando una pequeña terraza sobre la otra; sus paredes estan enlucidas

Dispuso de un recinto amurallado, del que aún quedan importantes restos, y que la rodeaba excepto por el lado que mira al cauce del río, pues aquí no era necesario, ya que la propia pared de la torre se alza sobre el acantilado; en dicho recinto subsiste un portillo en arco de medio punto que comunicaba el exterior con el subterraneo. A los pies del castillo, en una pequeña vaguada protegida de los vientos dominantes, aparecen restos de un pequeño poblado, habitado desde época ibérica hasta el siglo XIV, en el que todavía pueden apreciarse restos de muros de piedra y adobe y fragmentos cerámicos.

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